miércoles, 24 de junio de 2009

SALVIA ROMANA (Salvia esclarea)

Planta erguida bianual o perenne de hasta 1 m de altura, con grandes hojas pilosas de color verde matizadas de púrpura y pequeñas flores azules.

Ficha de toxicidad: No tóxico, no irritante, no sensibiliza. Debe evitarse su uso durante el embarazo y si se ingiere bebidas alcohólicas, ya que puede incrementar el estado de embriaguez.

Origen y distribución: Originaria del Sur de Europa, cultivada especialmente en la región mediterránea, Europa central, Rusia, Marruecos, Gran Bretaña y EEUU. Las salvias romanas, francesa, marroquí e inglesa se consideran de calidad superior a las restantes en la elaboración de productos de perfumería.

Otras especies: Estrechamente relacionada con S. Officinalis y S. Lavandulifolia, ambas utilizadas para obtener aceite esencial. Otros tipos de salvia son S. Pratensis y S. Verbenacea. La salvia romana no debe confundirse con una mala hierba común de los caminos, llamada eufrasia (Euphrasia).

Extracción: El aceite esencial se obtiene por destilación al vapor de los brotes florales y las hojas. Mediante extracción con solventes se obtienen un concreto y un absoluto, en pequeñas cantidades.

Componentes principales: Acetato de linalilo (hsta un 75%), linalol, pineno, mirceno y felandreno, entre otros. La composición varía según la procedencia geográfica de la planta; existen varios quimiotipos diferentes.

Propiedades que le reconoce la bibliografía existente:
Piel: acné, furúnculos, caspa, pérdidas del cabello, oftalmia, enfermedades inflamatorias, pieles y cabellos grasos, llagas, arrugas.
Circulación, musculatura y articulaciones: tensión arterial alta, dolores y molestias musculares.
Aparato respiratorio: asma, infecciones de garganta, tos ferina.
Aparato digestivo: espasmos, dispepsia, flatulencia.
Aparato génito-urinario: amenorrea, dolores de parto, dismenorrea, leucorrea.
Sistema nervioso: depresión, frigidez, impotencia, migrañas, tensión nerviosa y desórdenes relacionados con el estrés.
Efectos: anticonvulsivo, antidepresivo, antiflogístico, antiséptico, antiespasmódico, afrodisíaco, astringente, cicatrizante, desodorante, digestivo, emenagogo, hipotensor, tónico nervioso, regulador de la seborrea, sedante, estomacal, tónico y uterino.

Compatibilidades con otros aceites esenciales: Combina bien con los aceites de espliego, enebro, geranio de África, sándalo, cedro, jazmín, incienso, verbena, limón, mandarina.

Aceites vegetales que potencian sus propiedades: Manzanilla, jojoba, quinua, germen de trigo, sésamo.
Otros usos: El aceite y el absoluto se emplean como componentes fragantes y fijadores en la fabricación de productos de perfumería. Se utiliza en alimentación así como en la elaboración del Moscatel.